María Lucía Scuro: “El trabajo doméstico no remunerado equivaldría entre un quinto y un cuarto del PIB, según estimaciones en varios países”

Entrevista

Santo Domingo,  República Dominicana. (septiembre de 2022).  La socióloga uruguaya María Lucía Scuro es oficial de Asuntos Sociales de la Comisión Económica para América (CEPAL), organismo que dará asesoría técnica al Gobierno dominicano en el desarrollo del Sistema Nacional de Cuidados.

En una entrevista la investigadora y docente expone sobre los beneficios que tiene un Sistema Nacional de Cuidados para las mujeres, los niños y niñas y la fuerza laboral actual y futura en sentido general.

1-¿Cómo se siente de colaborar desde la CEPAL con la República Dominicana en un tema de vital importancia como es el cuidado?

Para la CEPAL es sumamente importante, es parte de nuestro mandato, y efectivamente de la Secretaría Técnica Regional sobre la Mujer de América Latina y el Caribe nos honra muchísimo poder participar y estar acompañando esta política nacional de cuidados.

2-¿Cómo valora el logro del Gobierno dominicano de anunciar una regulación del trabajo doméstico en la República Dominicana?

Decíamos hoy,  y lo decía claramente el presidente de la República, acá había una deuda histórica que tenía que ver con un sector absolutamente sumergido en condiciones precarizadas, y claramente la resolución es un gran paso, un piso desde el cual ya las mujeres trabajadoras en el sector puedan ver garantizados sus derechos como trabajadoras y de ahí en más seguir buscando la expansión de esos derechos.

3-¿Cuáles son los beneficios que tiene para el país la instalación de un Sistema Nacional de Cuidado?

El Sistema Nacional de Cuidados y las políticas de cuidados, justamente, además de beneficiar a las personas que directamente se atienden allí como los niños, la primera infancia, los adultos mayores o las personas con discapacidad tienen un gran potencial en términos de liberación de manos de obra. Las mujeres que pueden efectivamente ver cuidados y cuidadas a los integrantes de su familia, del hogar, tienen la posibilidad una vez que confían en estos sistemas de cuidado de salir al mercado laboral sin la barrera de las responsabilidades familiares.

Pero además de esto, hay estudios que muestran que los niños y las niñas que entran desde edades tempranas en la primera infancia a centros especializados, de calidad con personal profesional tienen después mejores rendimientos escolares y menos deserción del sistema educativo.

Claramente esto no solo beneficia a las mujeres, beneficia a la fuerza laboral, beneficia a los niños y a las niñas, beneficia a la futura fuerza laboral de la República Dominicana.

¿En términos, económicos cómo se traduce, es decir, cuál es la cifra económica del valor monetario?

Los países que hicieron estimaciones calculan que el trabajo doméstico no remunerado equivaldría entre un quinto y un cuarto del Producto Bruto Interno .

Si nosotros pagáramos, monetarizaramos todas aquellas tareas que hoy hacemos en el marco de nuestros hogares sin remuneración, desde preparar una comida, cambiar los pañales, atender a una persona enferma, si esto lo pusiéramos en dinero de cuánto costaría en el mercado, costaría entre un quinto y un cuarto del PBI.

¿De cuáles países de América Latina son estas cifras?

Hay distintas estimaciones, por ejemplo en El Ecuador 19,3, en México es 26,1. Depende, pero en promedio digamos que estamos en ese cifra.

¿Cuáles son sus principales recomendaciones para la instalación de un Sistema Nacional de Cuidados?

La coordinación intersectorial es absolutamente fundamental, la sostenibilidad financiera de los programas. No podemos hacer una apertura de servicios si no tenemos efectivamente una planificación de sostenibilidad financiera de los servicios y las propuestas que ofrezcamos y eso tiene que ver con profesionalizar la mano de obra, con perfeccionar efectivamente al personal que trabaja en ello y sostener de forma permanente las acciones que se inicien con este sistema de cuidados. beneficia a los niños y a las niñas, beneficia a la futura fuerza laboral de la República Dominicana.